Si nada sale mal (creo que hoy estoy un poco pesimista) y me deja este frío siberiano (y aquí mi padre chistosamente diría "¡¡melacogeconlamano!!"), este fin de semana voy a tener unos cuantos eventos de lo más chachipirulis que os contaré detalladamente la semana que viene...

Mañana me han invitado a una fiesta post desfile a la que iré con mi querida Lidia de Conzapatosnuevos (si no conocéis su blog, os insto, qué digo, os conmino, qué digo, os obligo a que lo visitéis si queréis ver los mejores outfits de streetsyle) y la mejor jefa que he tenido, Carol. Estaremos ahí, rodeadas de gente cool, muy alta, muy delgada, muy fashion, muy seria y muy intensa. Vamos, que voy a estar en mi salsa por los co*%#es. Pero encantada de ir, eso sí... ;)
Y el domingo, antes de irme a Granada a celebrar mi día con mi familia, si las cosas salen bien también, iré a un desfile en la pasarela esta que cada día tiene el nombre más largo. Ni idea de quién es porque no es a mí a quien han invitado sino que voy de acoplada, pero oye, yo me apunto a un bombardeo.
Lo malo es que no tengo ni pajolera idea de qué ponerme, porque entre tanto evento seguido y tanto frío, me he quedado sin ideas. Todo puede ser que vaya forrada como una cebolla, o que pase más frío "que un perro chico", que dicen en mi tierra.
En fin, de todo ello os daré cuenta, como decía, la semana que viene. Con fotos y todo, ¿eh? Así que, por favor, sed piadosas con mi cara del domingo...
Hala, a abrigarse, a quedarse en casita con una mantita y una buena peli la que pueda (y si es acompañada mejor que mejor), o a salir a la calle repitiéndose este mantra: "no hace tanto frío; el frío es un estado mental; no hace tanto frío; el frío es un estado mental; no hace tanto frío...". A mí me funciona... los primeros 15 minutos.
